Por: Belén Vázquez
El Museo Fallero de Valencia es una visita imprescindible para poder disfrutar del arte de las fallas cualquier día del año. Lo que fue un convento y más tarde una prisión militar, alberga losninots (figuras de las fallas) que fueron indultados del fuego desde 1934. Hay dos categorías de imágenes: los ninots de adultos y los ninots infantiles.
Cada artista fallero elige cada año la que considera la mejor figura de su falla, y esta será la que concurse en una exposición que se celebra una semana antes de las fallas (19 de marzo), para poder ser “salvada” de las llamas. Las figuras elegidas (por votación popular) no se queman y pasan a formar parte del museo.
La visita al Museo comienza en una sala con carteles explicativos sobre el origen de las fallas, una fiesta satírica que ya tiene más de 75 años de vida. A continuación vamos viendo los ninots, por riguroso orden cronológico, acompañados de los carteles que anunciaban las fiestas y explicaciones sobre los materiales con que se construían, que también fueron cambiando con el tiempo (papel cartón, madera y corcho blanco).
Debido a la altura limitada del edificio del Museo, aunque muchos ninots tienen una altura de varios metros, en el Museo sólo podremos ver las figuras con menor tamaño. Por este motivo, y aunque es muy recomendable una visita a este singular espacio, no dude en acudir a ver las fallas en directo, en sus respectivas plazas, si tiene la oportunidad.
Cómo llegar al Museo Fallero de Valencia
Dirección: Plaza de Monteolivete, 4 (cerca de la ciudad de las Artes y las Ciencias).
Transporte: Líneas de EMT (BUS) 14, 15, 18, 35 Y 95.
Horario: lunes a sábado de 10.00 a 14.00 y de 16.30 a 20:30. Domingos y fiestivos de 10.00 a 15.00 h. Lunes cerrado.
Precio: 2 euros. Sábados, domingos y festivos, entrada gratuita.